jueves, 14 de julio de 2011

Controlar la mente. Recobrar la mente.

"En el sendero de la evolución de la conciencia, la madurez interior y la integración psíquica, la mente puede ser un gran escollo. De hecho, por la general lo es. Como durante años no hemos cultivado, atendido y cuidado la mente, ésta se ha ido dispersando, deteriorando y neurotizando. La mente ha enfermado, se ha cristalizado, ha entrado en un círculo viciado de reactividades que se retroalimentan creando confusión, insatisfacción y caos. Esta mente así genera sufrimiento, tensión, división y conflicto. Es la mente de la gran mayoría de los seres humanos, que engendra avidez, ira, celos, envidia, vanidad, agresividad y otras trabas. Esta mente se nos impone, nos limita, esclaviza y embota. Ésta es precisamente la mente que hay que cambiar, modificar, transformar. Porque:
- La misma mente que es enemiga, puede ser amiga.
- La misma mente que es obstáculo, puede convertirse en aliada.
- La misma mente que ata, es la que libera".
Ramiro Calle
(de la introducción de Recobrar la mente. Ramiro Calle)
http://www.inabima.org/BibliotecaInabima2/C/Calle,%20Ramiro%20A/Calle,%20Ramiro%20-%20Recobrar%20la%20mente.pdf
LA MEDITACIÓN DE LA MENTE NATURAL : CONTROLAR LAS ONDAS DE PENSAMIENTO
de Ramiro A.Calle, el Lunes, 22 de noviembre de 2010 a las 7:40

LA MEDITACIÓN DE LA MENTE NATURAL
Ejercicio 1: 1. Sentarse Quieto/Controlando las Ondas del Pensamiento
Propósito: Detener tu mente y experimentar lo Real.
“El punto de vista yógico es la percepción directa de la realidad, que está basada en el control de las ondas de pensamiento; así tienes una penetración en tu propia mente y conciencia, con el conocimiento de la realidad omni-permanente.”
Aparta una buena cantidad de tiempo, en que sepas que no serás molestado. Dedica todo tu ser a experimentar directamente la naturaleza de tu mente y yo original, con la exclusión de todo lo demás. Pon todo en esto. Mantente diciéndote a ti mismo que no hay nada más importante que aclarar tu mente. Siéntate tranquilo, y deja que tu mente se relaje. Deja fuera todas las preocupaciones. No pienses en nada, ni en nadie. Sólo una mente confundida piensa que la felicidad está en otra parte. Reconoce que todos los pensamientos son pasado. Todas las palabras son pasado. Tú ya estás aquí, pero sólo sabrás esto, hasta que te esfuerces en aclarar tu mente.
Deja que tu mente se disuelva, de vuelta a su estado natural. Todo aquello que puedes tocar está afuera. Olvida todos tus apegos externos. Ellos no existen. No pienses. Si surgen los pensamientos, rastréalos inmediatamente hasta su fuente, y desaparecerán, puesto que son sólo fantasmas. Esta práctica debe continuar en todo momento, de modo que se convierta en algo tan natural como la misma respiración. Si en algún momento, no estás experimentando paz, identifica qué es lo que ha atrapado a tu mente.
Esta es la instrucción para la meditación tradicional del Dr. Arcturus, extraída del Boletín del Proyecto Rinri, Volumen 1, No. 3:
“La práctica para despertar la mente natural es extraordinariamente simple. Es la forma y experiencia más humana que puedes tener. Es también el depósito de la dignidad natural. Además, cualquiera puede hacerlo. Tan sólo tienes que sentarte tranquilo. La manera natural es sentarse en el suelo, sobre un almohadón que sea firme, que mantenga recta la espalda, y que nos permita sentarnos con las piernas cruzadas. En el suelo, sobre un almohadón como este, es lo más preferible y más natural. Sin embargo, si eso no es posible debido a tu salud, o a la condición de tu cuerpo, siéntate entonces sobre en una silla, con los pies firmemente apoyados en el suelo y la espalda recta, sin reclinarte en el respaldo de la silla.
“Mantener la espina dorsal recta, significa ya despertar y permanecer despierto. La barbilla está ligeramente hacia abajo, y los ojos están entreabiertos, mirando por encima de la nariz, hacia el suelo frente a ti. Los ojos están abiertos para evitar dormirse, o ir a los reinos de la fantasía, que ocurre cuando los ojos están cerrados. El punto es no escapar de la realidad, sino ver y experimentar la mente natural, sin actuar sobe ella. Las manos están cómodamente sobre las rodillas, con las palmas hacia abajo. Mantener esta, es la posición natural del ser humano alerta. Mantente chocando tu postura mientras estás sentado. Quieres que la espina esté recta, sosteniéndote. La capacidad para hacer esto es lo que distingue al ser humano de virtualmente cualquier otro animal. ¡No descuides esta postura!
“Ahora, en esta posición, no tienes ninguna otra cosa qué hacer más que observar tu respiración. Respira normalmente. Cuando seas consciente de tus pensamientos – no importa en lo más mínimo la naturaleza o el contenido del pensamiento – simplemente etiquétalo como “pensamiento”, y mientras exhalas, disuelve el pensamiento. En el mero momento previo a la exhalación, y justo cuando el pensamiento sea disuelto, está la “brecha” entre los pensamientos. Esta brecha es con la que vas a querer familiarizarte y cultivar. Es la semilla de la mente natural, y la clave de tu verdadero y auténtico yo.
“Trata de hacer esto por media hora, 45 minutos, o incluso una hora. Tienes que darte cuenta de que por sólo mantener esta posición, no importa qué esté ocurriendo en tu mente, tú eres paz. Estás resistiendo los impulsos de pensamiento no examinados, a hacer cosas, mientras permaneces en una posición que es completamente no agresiva. Imagina a todos en el planeta haciendo esto durante una hora cada mañana, antes de que comiencen sus días. ¿No estaría entonces todo el planeta en paz? La importancia de mantener esta posición no puede enfatizarse suficientemente. Es el 99 por ciento de esta práctica de experimentar tu mente natural, porque es realmente la única manera en que vas a ser capaz de experimentar tu mente natural, y nada más. Además, si no sabes lo que es la mente natural, no puedes en realidad decir que estás en el tiempo natural.“Puede argumentarse que puedes experimentar la mente natural cuando conduces el automóvil, o realizas trabajos de abalorios, o juegas golf, o, ciertamente, haces jardinería, lo cual es bastante cierto. Pero mientras estás involucrado en estas actividades, todavía estás preocupado por algo. No estás realmente dedicando todo tu ser a experimentar directamente la naturaleza de tu mente y yo original, con la exclusión de todo lo demás. Y ese es el punto de este entrenamiento. Tener la pura y cruda experiencia de ver tu propia mente; eso, y nada más.
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